4 maneras en que el agua ayuda a perder peso

¿Cuánta agua bebes todos los días? Para la mayoría de los adultos, la respuesta es: “No es suficiente”.

Según algunas estimaciones , el adulto promedio bebe menos de cinco tazas de agua por día; los adultos activos beben más agua que sus compañeros menos activos pero aún beben mucho menos que las 64 onzas recomendadas de agua por día, y la deshidratación podría afectar el número de la balanza.

La investigación publicada en Annals of Family Medicine encontró una asociación entre la deshidratación y la obesidad: los que bebían menos agua tenían el mayor índice de masa corporal.

“Independientemente de su peso, beber mucha agua durante todo el día puede ayudarlo a mantenerse hidratado y sentirse lo mejor posible”, dice Tammy Chang, MD, MPH, y profesora asistente de medicina familiar en la Universidad de Michigan. “Es un hábito saludable que es fácil y barato”.

Si está tratando de perder peso, aquí hay cuatro razones respaldadas por la investigación para beber más agua:

1. EL AGUA POTABLE REDUCE LAS CALORÍAS

Cuando se trata de perder peso, la elección de café helado, gaseosas y bebidas deportivas puede dificultar la pérdida de peso. La razón: elegir estas bebidas sobre agua podría agregar calorías (y libras).

Por otro lado, cuanto más agua bebas, menos calorías consumes, según un estudio publicado en The Journal of Human Nutrition and Dietetics. El estudio de 2016 encontró que aquellos que beben un vaso extra de 8 onzas de agua por día consumen 68 calorías menos; aquellos que bebieron tres vasos de agua adicionales consumieron 205 calorías menos, lo que provocó una pérdida de peso de 1/2 libra por semana.

“He descubierto que a veces las personas pueden pensar que están hambrientas cuando están realmente sedientas”, dice Chang. “Beber agua o comer frutas y verduras, que tienen un alto contenido de agua, puede ayudar a frenar ese antojo y ayudarlo a mantenerse hidratado”.

2. EL AGUA POTABLE REDUCE LA FATIGA

Demasiado cansado para entrenar? Traquetear con un vaso de agua podría ayudarlo a pasar del sofá a la cinta. “La deshidratación puede hacerte sentir lento”, dice Joan Salge Blake, EdD, dietista, profesora asociada clínica de nutrición en la Universidad de Boston y autora de “Nutrition & You”.

Aumentar la ingesta de agua de 1,2 litros (aproximadamente cuatro vasos de 8 onzas) a 2,5 litros (ocho vasos de 8 onzas) durante tres días ayudó a mejorar el estado de ánimo y reducir la fatiga, según un estudio publicado en PLOS One. El mismo estudio encontró que beber menos agua se relacionó con estados de ánimo, dolores de cabeza y fatiga más bajos, y nada es tan rápido como un dolor de cabeza, mal humor y agotamiento total.

3. EL AGUA POTABLE PUEDE IMPULSAR EL METABOLISMO

Aumentar su consumo de agua también puede aumentar su metabolismo. La investigación publicada en The Journal of Endocrinology and Metabolism descubrió que beber 16 onzas de agua provocaba un aumento temporal del 30% en el metabolismo. Beber un litro y medio más de agua todos los días podría ayudarlo a quemar 200 calorías más diariamente.

Un segundo estudio arrojó dudas sobre el original, pero observó un pequeño aumento en el metabolismo asociado con el consumo de agua fría (pero no aumentó después de beber agua a temperatura ambiente). Aunque la investigación sobre el efecto del agua en el metabolismo es conflictiva, Blake cree que el agua nunca es una mala elección, y señaló: “El agua es un nutriente importante. Es una bebida refrescante con cero calorías”.

4. ENSAYOS DE COMBUSTIBLES DE AGUA POTABLE

Hay una razón por la cual el American Council on Exercise recomienda beber 17-20 onzas de agua 2-3 horas antes de un entrenamiento, 21-30 onzas por una hora de ejercicio y 8 onzas dentro de los 30 minutos de terminar un entrenamiento. “Si está tratando de hacer ejercicio cuando está deshidratado, no podrá alcanzar el máximo rendimiento”, dice Blake.

Blake aconseja pesar antes y después de un entrenamiento: por cada libra de peso perdido, que es toda la pérdida de agua, sugiere beber 2 1 / 2-3 tazas de agua. El color de su orina también es un indicador clave de la hidratación, según Chang.

“Por lo general, su orina será de color claro si está bien hidratado”, dice ella. “Si tu orina está oscura, entonces probablemente necesites más agua”.

Fuente: blog.myfitnesspal.com